El PP de Culleredo, molesto por las acusaciones vertidas por el alcalde durante el transcurso del pleno municipal
La situación presupuestaria del Concello de Culleredo resulta un tanto peculiar. Los presupuestos del 2023 no vieron la luz hasta el mes de marzo, algo extraño teniendo en cuenta que en aquel momento el PSOE gobernaba con mayoría absoluta. Este retraso en la aprobación, o incluso tenerlos prorrogados durante todo el año, es una situación más propia de los gobiernos en minoría, situación a la que se tendrá que adaptar en el actual mandato.
El pasado día 12, mientras se celebraba el Pleno Municipal, el alcalde se quejó por la falta de apoyo prestado por los populares a las modificaciones de crédito llevadas al pleno de octubre, acusando a esta fuerza de paralizar las inversiones municipales. Situación curiosa si tenemos en cuenta que esos presupuestos fueron aprobados por Rioboo cuando disfrutaba de mayoría absoluta y por lo tanto no necesitaba realizar concesiones a otros grupos políticos.
Pero estas acusaciones vertidas por José Ramón Rioboo hacia el principal grupo de la oposición que lidera Izaskun García, no cayeron en saco roto y la portavoz popular reaccionó realizando las siguientes declaraciones:
“Les pedimos en numerosas ocasiones sentarnos y que nos explicasen qué inversiones estarían beneficiadas por ese suplemento y cuáles quedarían fuera, especificar las partidas, y en todas ellas fue imposible obtener esa información. Así desde luego, que no cuenten con el apoyo del Partido Popular”
“Un gobierno municipal con mayoría absoluta que sólo es capaz de licitar el 30% de las inversiones y ejecutar apenas el 16% no puede tener la poca vergüenza de acusar el principal partido de la oposición de paralizar la ejecución del presupuesto municipal”.
Este nuevo escenario, salido de las urnas el pasado mes de mayo, exige al alcalde una nueva estrategia para sacar adelante sus proyectos, ya que los votos del PSdeG-PSOE no son suficientes y necesita adaptarse a la realidad de gobernar en minoría.