El movimiento político rechaza el acuerdo urbanístico impulsado por el gobierno de Inés Rey, al que acusa de priorizar la especulación frente a los derechos de la ciudadanía
El Movimiento Sumar Coruña ha arremetido con dureza contra el convenio urbanístico de As Xubias, aprobado por el gobierno local de Inés Rey (PSOE), al que acusa de «entregar el litoral de la ciudad a un fondo especulador sin garantías para la ciudadanía». Según la formación, el acuerdo beneficiaría principalmente al fondo suizo Ginkgo Advisor, permitiéndole construir en suelo estratégico sin reservas de vivienda protegida, límites a la turistificación o compromisos claros de servicios públicos.
Un modelo urbanístico «excluyente y opaco»
El polémico convenio, que lleva meses generando rechazo entre colectivos vecinales y organizaciones sociales, ha sido tachado por Sumar Coruña como un ejemplo de «urbanismo al servicio del mercado». Trinidad Palacios, portavoz del movimiento, criticó que el gobierno municipal hable de «recuperación urbana» mientras impulsa un proyecto que, en su opinión, «consolida la expulsión social, privatiza la costa y margina a los vecinos de las decisiones».
«Este acuerdo se ha negociado a espaldas de la gente, ignorando alegaciones y excluyendo el PXOM [Plan Xeral de Ordenación Municipal], que debería ser la base de cualquier desarrollo urbanístico democrático», denunció Palacios.
Uno de los ataques más directos de Sumar Coruña fue dirigido a la alcaldesa Inés Rey, a quien cuestionó: «¿En qué se diferencia su urbanismo del de Miguel Lorenzo?». Palacios insistió en que, pese al discurso de «regeneración», el convenio repite patrones de especulación, falta de transparencia y sumisión a intereses privados.
«Nos venden zonas verdes y la cesión del Pazo de Guyatt como grandes logros, pero en realidad esto es un regalo a un fondo de inversión«, afirmó. «Mientras, los vecinos se enfrentan a un futuro de alquileres inalcanzables y barrios convertidos en parques temáticos turísticos».
La alternativa: participación ciudadana y protección del litoral
Frente a este modelo, Sumar Coruña exige suspender el convenio y abrir un proceso de planificación «realmente participativo». Entre sus propuestas destacan:
- Priorizar la vivienda pública y protegida en As Xubias.
- Proteger el litoral como espacio común, no como negocio inmobiliario.
- Vincular cualquier desarrollo urbanístico al PGOU y a mecanismos de control vecinal.
«Queremos zonas verdes y paseos, pero no a cambio de desalojar a la gente de sus barrios«, remarcó Palacios. «As Xubias merecen un futuro pensado para quienes viven aquí, no para quienes especulan desde Zúrich».
El movimiento ha hecho un llamamiento al BNG para que mantenga su oposición al proyecto y no ceda ante presiones. La pregunta ahora es si el gobierno de Rey rectificará o si, como temen los críticos, A Coruña terminará siendo «una ciudad para fondos de inversión, no para sus habitantes».

