Este lunes, el puerto de A Coruña recibió la primera visita del Mein Schiff 7, un impresionante crucero de 16 cubiertas, recién botado en junio de este año y destinado exclusivamente al pasaje alemán. La llegada de este imponente buque, a las 10:30 horas, marca un hito para la ciudad, ya que además de ser la primera vez que atraca en estas aguas, simboliza el crecimiento continuo del turismo de cruceros en la región.
Un día de récord para A Coruña
Con más de 3.100 pasajeros a bordo, sin contar con la tripulación, el Mein Schiff 7 ha añadido una cifra importante a las estadísticas de este año, que ya han superado el total de pasajeros registrados en 2023. Luis del Moral, director de la terminal de cruceros, destacó la relevancia de esta escala: «A estas alturas del año, ya hemos superado el número total de pasajeros del acumulado del año pasado, lo que refleja el auge del turismo de cruceros en A Coruña».
La ciudad ha experimentado un repunte significativo en la llegada de cruceros en los últimos años, consolidándose como un destino popular para las principales navieras internacionales. Este éxito se debe tanto a las infraestructuras del puerto como a la variada oferta cultural y gastronómica que A Coruña ofrece a sus visitantes.
El Mein Schiff 7: una joya flotante
El Mein Schiff 7 es un crucero que ha causado gran expectación desde su botadura en junio. Con 16 cubiertas y un diseño de vanguardia, ofrece a sus pasajeros todas las comodidades posibles, desde piscinas, spas, gimnasios y áreas recreativas hasta una amplia variedad de restaurantes y bares. Exclusivo para el mercado alemán, este barco se destaca por su diseño moderno y su enfoque en ofrecer experiencias de lujo en alta mar.
Además, el buque cuenta con avanzados sistemas de sostenibilidad, siendo uno de los más ecológicos de su categoría, lo que refuerza el compromiso de la naviera TUI Cruises con la protección del medio ambiente.
Una cálida bienvenida
Con motivo de su primera escala en A Coruña, se celebró una ceremonia de bienvenida a bordo del Mein Schiff 7, en la que las autoridades locales y portuarias entregaron una metopa conmemorativa al capitán del barco, como parte del tradicional acto de bienvenida en este tipo de eventos. Este gesto simboliza la importancia de la relación entre la ciudad y las navieras, que siguen apostando por A Coruña como puerto de escala para sus itinerarios.
La entrega de metopas es un símbolo protocolario que celebra el estreno de un barco en un puerto y refuerza los lazos de colaboración para futuras visitas. Durante la ceremonia, se destacó la importancia de esta visita para la promoción del turismo local y la proyección de A Coruña como un destino de cruceros de referencia en el Atlántico.
Una breve pero intensa estancia
El Mein Schiff 7 permanecerá en la ciudad hasta las 19:00 horas, permitiendo a sus más de 3.100 pasajeros disfrutar de una jornada completa para explorar A Coruña y sus alrededores. Los turistas podrán recorrer las calles del centro histórico, visitar monumentos emblemáticos como la Torre de Hércules o disfrutar de las vistas panorámicas desde el Monte de San Pedro.
Los cruceristas también tendrán la oportunidad de degustar la gastronomía local, con especial atención a los productos del mar, y hacer compras en las tiendas y mercados de la ciudad, lo que supone un impacto económico positivo para el comercio local.
Apuesta por el turismo de cruceros
La llegada del Mein Schiff 7 subraya el creciente protagonismo de A Coruña en el turismo de cruceros. Las autoridades portuarias continúan trabajando para fortalecer la infraestructura y atraer cada vez más barcos de esta magnitud, con el objetivo de convertir a la ciudad en un punto estratégico dentro de las rutas de cruceros por el Atlántico.
Con visitas como esta, se espera que el puerto de A Coruña siga batiendo récords de llegada de pasajeros en los próximos años, contribuyendo a la dinamización de la economía local y consolidando la ciudad como un referente turístico internacional.
El Mein Schiff 7 zarpará hacia su próximo destino esta tarde a las 19:00 horas, dejando un recuerdo positivo tanto para los pasajeros como para los coruñeses que han sido testigos de su imponente presencia en el puerto.