El Juzgado de lo Social número 4 obliga a la empresa a restituir las condiciones laborales de dos trabajadoras, tras declarar nula una modificación sustancial en sus jornadas.
El Centro Deportivo Municipal (CDM) del Castrillón vuelve a estar en el foco de atención tras una nueva sentencia judicial que condena a Viraxes, S.L., la empresa que gestiona estas instalaciones, por modificaciones ilegales de las condiciones laborales de dos trabajadoras. Esta resolución se suma a una serie de conflictos legales que han llevado a la empresa a los tribunales en repetidas ocasiones.
Detalles del fallo judicial
El pasado 5 de noviembre, el Juzgado de lo Social número 4 dictó sentencia en un caso presentado por dos trabajadoras de Viraxes, quienes denunciaron la reducción de su jornada semanal en 4,5 horas a partir de julio de 2024. La decisión judicial considera nula esta modificación, calificándola como una represalia contra las trabajadoras por su afiliación al sindicato FAC-USO Galicia y su participación en las elecciones sindicales del pasado mayo.
El juez determinó que la empresa no cumplió con los requisitos legales de forma necesarios para realizar dicha modificación y condenó a Viraxes a restituir las condiciones laborales previas de las trabajadoras. Aunque la sentencia no es firme y cabe recurso de suplicación, se considera un nuevo revés legal para la empresa.
Un historial de conflictos laborales
Este no es el único caso que enfrenta Viraxes en los tribunales. Según denuncia el sindicato FAC-USO Galicia, ya son 6 de los 17 trabajadores del CDM Castrillón los que han llevado a la empresa a juicio por diferentes motivos.
Entre los casos más relevantes se encuentra la declaración de nulidad, hace meses, del despido de un socorrista que se negó a firmar un documento relacionado con su afiliación sindical. En aquella ocasión, la justicia condenó a la empresa a pagarle los salarios no percibidos, además de 7.501 euros por daños y perjuicios.
Actualmente, hay otro juicio programado para el 18 de diciembre, en el que un cuarto trabajador del centro deportivo reclamará contra una modificación sustancial de sus condiciones laborales, también vinculada a su pertenencia al sindicato USO.
Denuncias de incumplimientos laborales y administrativos
Desde FAC-USO Galicia, el sindicato ha señalado que lleva más de un año denunciando incumplimientos sistemáticos por parte de Viraxes en la gestión del CDM Castrillón. Además, acusan al gerente de la empresa, Andrés Eirís Barca, de incumplir acuerdos judiciales, como el firmado en el acto de conciliación del pasado 30 de octubre con otra trabajadora.
Según el sindicato, estas situaciones reflejan una gestión laboral deficiente, marcada por represalias contra los empleados vinculados a actividades sindicales y una actitud negligente respecto a las obligaciones legales en materia de condiciones de trabajo.
Repercusiones en el CDM Castrillón
Los constantes litigios y conflictos laborales no solo afectan a los trabajadores del centro, sino también a los usuarios del CDM Castrillón, que dependen de un personal estable y motivado para garantizar el buen funcionamiento de las instalaciones.
El sindicato reclama que se respeten los derechos de los empleados y que se adopten medidas inmediatas para acabar con las prácticas que consideran abusivas.
Un llamado a la responsabilidad
Desde FAC-USO Galicia, se exige a las autoridades competentes y a la gerencia de Viraxes que cumplan con las resoluciones judiciales y garanticen unas condiciones laborales dignas para los empleados del CDM Castrillón.
Esta nueva sentencia judicial subraya la importancia de que las empresas respeten los derechos laborales y evita que se perpetúen prácticas contrarias a la legalidad. Con más casos pendientes de resolución, el futuro de la gestión del CDM Castrillón queda en el aire, dejando en evidencia una situación laboral que continúa deteriorándose.