El campo de golf de Miño se convirtió este fin de semana en el escenario de un evento que trascendió lo deportivo para convertirse en una auténtica celebración de solidaridad. Más de 160 participantes se unieron en la primera edición del Torneo Benéfico de la Fundación Diego González Rivas, logrando recaudar más de 25.000 euros —cifra aún provisional— destinados a salvar vidas en países con escaso acceso a la cirugía especializada.
Una respuesta abrumadora
Inicialmente planeado como una jornada, el torneo se extendió a dos días debido a la gran acogida. A pesar de las previsiones meteorológicas, el tiempo acompañó, permitiendo disfrutar de un campo en perfectas condiciones y una atmósfera cargada de generosidad y compromiso social.
«Este torneo ha sido un hito, no solo por la recaudación, sino por el espíritu que lo ha envuelto», destacó el Dr. Diego González Rivas, presidente de la fundación, en un mensaje enviado desde China, donde actualmente realiza intervenciones quirúrgicas. Los fondos recaudados permitirán que la unidad móvil quirúrgica de la fundación —única en el mundo en cirugía torácica compleja— viaje este verano a Angola y Sierra Leona, sumándose a los proyectos ya en marcha en Ghana.
Un día histórico para el club de Miño
El presidente fundador del club de golf de Miño no ocultó su emoción: «Nunca habíamos vivido algo así. Ver el campo lleno, la colaboración de patrocinadores y el entusiasmo de los jugadores por una causa tan noble es un orgullo».
Los ganadores recibieron premios donados por patrocinadores, destacando el trofeo principal, una obra del artista Julio Pereira: una escultura de un golfista con los pulmones en relieve, en honor a la especialidad médica del Dr. González Rivas.
Palmarés y emoción en la entrega de premios
El joven Carlos Díaz Díaz se alzó como campeón scratch, poco antes de comenzar una beca deportiva en EE.UU. Otros galardonados fueron Manuel Tie, Ángel Castañeda, Pablo Orozco, Alejandro Alonso, Mario Pérez Enjamio (también campeón en hándicap), Concepción Picos y José Carlos Pérez Poza, entre otros.
El acto contó con la presencia de los padres del Dr. González Rivas, representantes de la fundación, el conselleiro de Deporte Diego Calvo, el alcalde de Miño y numerosos patronos, quienes subrayaron el impacto social de iniciativas como esta.
«Hoy no hemos jugado solo al golf, hemos jugado por la vida», resumió un participante. La Fundación agradece a todos los colaboradores, voluntarios y jugadores por hacer posible un éxito que demuestra que la solidaridad salva vidas.