Los trabajadores de la Escuela Municipal de Música tendrán que esperar hasta el último momento para ver resuelta su situación laboral y financiera
El pleno extraordinario celebrado el pasado 18 de diciembre aprobó de manera definitiva un modificativo presupuestario por valor de 10,7 millones de euros, incluyendo un suplemento de crédito de 660.000 euros destinado al Consorcio para la Promoción de la Música. Esta partida tiene como objetivo cubrir una parte de los gastos de la Orquesta Sinfónica de Galicia (OSG) y de la Escuela de Música, como alquileres, contratación de solistas, incrementos salariales y otros conceptos.
Además, se aprobó una ampliación de 150.000 euros específicamente para la Escuela Municipal de Música, con el fin de abordar atrasos salariales, convenios pendientes y gastos ordinarios.
Sin embargo, estos fondos no garantizan una solución inmediata. Los obstáculos administrativos y la falta de previsión en la gestión municipal podrían poner en peligro su ejecución antes del cierre de 2024, dejando sin efecto estas partidas en el presupuesto de 2025.
Problemas presupuestarios y administrativos
Uno de los principales inconvenientes radica en que, aunque el modificativo fue publicado en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) el 19 de diciembre, debe integrarse en los presupuestos del Consorcio para la Promoción de la Música. Esto debe realizarse de manera urgente, ya que el Ayuntamiento de A Coruña carece de un presupuesto aprobado para 2025, lo que obliga a prorrogar el presupuesto de 2024 sin incluir los modificativos.
Además, la OSG afronta una falta de liquidez crónica. El remanente de tesorería de 2023, que asciende a 357.000 euros, no fue compensado en el modificativo, perpetuando las dificultades de pago. Este escenario complica aún más el cumplimiento del Período Medio de Pago (PMP), que en septiembre ya alcanzaba los 147 días, muy por encima del límite legal de 30 días.
En el caso de la Escuela Municipal de Música, los 150.000 euros aprobados son suficientes para cubrir los atrasos del personal, pero su ejecución está condicionada a la tramitación de un convenio de colaboración entre el Ayuntamiento y el Consorcio, ya que el contrato administrativo vigente ha caducado. Si no se formaliza este convenio antes de fin de año, los fondos no ejecutados quedarán anulados.
Consecuencias
La falta de planificación y los retrasos administrativos generan incertidumbre tanto para los trabajadores de la Escuela Municipal de Música como para los proveedores de la OSG, afectando la estabilidad de ambas instituciones.
A pocos días de finalizar el año, el Ayuntamiento se enfrenta a una auténtica carrera contrarreloj para garantizar que los fondos aprobados se materialicen y no queden en papel mojado. Mientras tanto, trabajadores y proveedores siguen esperando soluciones definitivas.