El Bloque Nacionalista Galego exige al gobierno local del PSOE un cambio de modelo para priorizar a productores y vecinos frente al enfoque turístico
El mercado municipal de Betanzos se ha convertido en el centro de un nuevo enfrentamiento político tras declararse desierto el concurso para privatizar su gestión. El BNG ha aprovechado este fracaso para reclamar nuevamente que el Ayuntamiento asuma directamente la gestión de este espacio emblemático, en lugar de persistir en un modelo de concesión a empresas privadas que, según argumentan, ha demostrado ser inviable.
Un modelo que no funciona
El concejal del BNG, Salvador González, ha revelado que el concurso para explotar la mayor parte de la Pescadería –una de las zonas principales del mercado– ha quedado desierto a pesar de ofrecerse por un canon mínimo, equivalente a lo que ya pagaban las pequeñas comerciantes que trabajaban en el lugar.
«Esto era previsible», aseguró González. «El gobierno local del PSOE insistió en tratar el mercado como un atractivo turístico, buscando una empresa privada que lo gestionara como si esto fuese una gran ciudad. Pero Betanzos no es Madrid ni Barcelona, y aquí el negocio no está en el turismo, sino en servir a los vecinos y a los productores de la comarca».
Críticas al enfoque del PSOE
Desde el BNG sostienen que el equipo de gobierno socialista ha ignorado las demandas ciudadanas y las propuestas alternativas. Hace dos años, cuando el PSOE anunció un proyecto de revitalización del mercado financiado con fondos europeos, los nacionalistas lo apoyaron, entendiendo que era una inversión necesaria. Sin embargo, critican que, una vez modernizadas las instalaciones, se optara por un modelo de privatización que ha terminado en fracaso.
«El Pleno ya instó al gobierno a estudiar la gestión directa, pero hicieron oídos sordos. Ahora que ni siquiera las empresas privadas ven rentable el negocio, es el momento de rectificar», insistió González.
Una apuesta por el comercio local
El BNG lleva años defendiendo que el mercado municipal debe ser, ante todo, un servicio público. «Nuestros productores locales tienen difícil acceder a las grandes superficies. Este mercado debería ser su escaparate, un espacio donde la gente de Betanzos pueda comprar productos frescos y de calidad directamente de quienes los cultivan o elaboran», explicó el concejal.
Además, recuerdan que durante su etapa al frente de la Concejalía de Comercio –hace dos décadas– ya impulsaron mejoras en accesibilidad y equipamientos, y propusieron complementar la oferta con mercados temporales en la plaza contigua para revitalizar la zona.
Turismo sí, pero no como prioridad
Los nacionalistas no rechazan el turismo como fuente complementaria de ingresos, pero insisten en que no puede ser el eje central. «Un mercado de abastos construido y reformado con dinero público debe servir, primero, a quienes viven aquí. El turismo puede ser un complemento, pero no podemos condicionar todo a ese sector», concluyó González.
¿Cambio de rumbo?
Con el concurso desierto y las críticas en aumento, la pelota está ahora en el tejado del gobierno local. El BNG espera que el PSOE rectifique y apueste por un modelo de gestión pública que garantice la viabilidad del mercado sin depender de intereses privados.
Mientras, las vendedoras y productores locales aguardan una solución que les permita seguir trabajando en un espacio que, más que un negocio, es parte fundamental de la vida comercial y social de Betanzos.