El flagrante incumplimiento de la Ley de Contratos del Sector Público deja al IMCE en una situación muy comprometida
Durante el último pleno ordinario del mes de junio se aprobó un modificativo de crédito para el pago de facturas del año 2023 que contrató el Instituto Municipal Coruña Espectáculos durante el periodo electoral del pasado año, pero estos contratos reunían un cúmulo de irregularidades según el informe del propio interventor, destacando el incumplimiento del proceso administrativo que marca la ley.
La apertura de expedientes después de la prestación de los servicios, carecer de crédito para la contratación, contratos sin publicidad y fraccionamiento de facturas son algunas de las anomalías que se llevaron a cabo desde el Instituto Municipal que preside Inés Rey.
Esta forma de actuar no ocurrió únicamente en 2023, ya que durante 2024 son varios los levantamientos de reparos que ha tenido que firmar la alcaldesa. Por desgracia, las irregularidades forman parte del modus operandi habitual del IMCE.
El pasado viernes, en Las Palmas de Gran Canarias, dos agentes de la Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) registraron durante horas la sede de la Sociedad de Promoción de Las Palmas, un organismo similar al IMCE de A Coruña. La inspección se produjo a petición de la Fiscalía Anticorrupción, órgano al que acudió hace unas semanas el Partido Popular para denunciar presuntas irregularidades en varias adjudicaciones realizadas por esta empresa pública, participada en su totalidad por el Ayuntamiento de las Palmas.
Las irregularidades denunciadas tienen muchas similitudes con las del IMCE, fundamentalmente por el incumplimiento de Ley de Contratos del Sector Público con unos importes muy parecidos. En el caso de Las Palmas de Gran Canaria, el origen es una denuncia del PP, actuando a continuación la Fiscalía Anticorrupción que investigará posibles delitos de prevaricación y malversación de fondos públicos.
Un caso muy destacado en A Coruña fue la contratación de los servicios asociados para la celebración de la Tall Ship del 2023. La regata que hizo escala en nuestra ciudad no era la prueba principal, como se pudo observar por la baja participación de veleros, pero su coste ascendió a importes de las anteriores ediciones en las que A Coruña sí formaba parte de la regata principal. Este evento tuvo una gestión calamitosa, dividiendo gastos entre la concejalía de Deportes y el IMCE. Además del reparto del gasto, destacamos que los expedientes se iniciaron con fechas posteriores a la realización de los servicios asociados a la regata, lo que a todas luces constituye una evidente irregularidad.