La opacidad del gobierno de Inés Rey
La transparencia, el acceso a la información pública y las normas de buen gobierno deben ser los ejes fundamentales de toda acción política. Sólo cuando la acción de los responsables públicos se somete a escrutinio, cuando los ciudadanos pueden conocer cómo se toman las decisiones que les afectan, cómo se manejan los fondos públicos o bajo qué criterios actúan nuestras instituciones podremos hablar del inicio de un proceso en el que los poderes públicos comienzan a responder a una sociedad que es crítica, exigente y que demanda participación de los poderes públicos.
Este es el inicio del preámbulo de la Ley de Transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno. También contiene otro párrafo destacable: Los países con mayores niveles en materia de transparencia y normas de buen gobierno cuentan con instituciones más fuertes, que favorecen el crecimiento económico y el desarrollo social.
Esta ley, como recoge su artículo 2.1.a, es de aplicación en las entidades que integran la Administración Local. En el caso de A Coruña, tanto el gobierno local, como el IMCE y demás consorcios municipales.
¿Qué dice la Ley de Transparencia?
Según la legislación vigente, deberán publicarse todos los contratos, con indicación del objeto, duración, el importe de la licitación y de adjudicación, el procedimiento utilizado para su celebración, los instrumentos a través de los que, en su caso, se ha publicitado, el número de licitadores participantes en el procedimiento y la identidad del adjudicatario, así como las modificaciones del contrato. Igualmente serán objeto de publicación las decisiones de desistimiento y renuncia de los contratos.
En el caso de contratos menores, la ley permite que se realice de forma trimestral.
También indica que se deberán publicar las declaraciones anuales de bienes y actividades de los representantes locales. Cabe recordar que el actual Gobierno local ha tardado nueve meses en presentarlas.
¿Qué publicita el gobierno de Inés Rey?
En la presentación del portal de transparencia del Concello, el concejal de contratación anunció que “con este rexistro público, A Coruña convértese no primeiro Concello de Galicia en poñer esta ferramenta á disposición da cidadanía”
“Calquera cidadán o cidadá pode consultar desde hoxe en tempo real os contratos da administración e os procedementos seguidos para a súa adxudicación.”
«Hoxe damos un paso na transparencia do Concello, un paso que non ten marcha atrás, coa posta a disposición da cidadanía dunha ferramenta na que se poden consultar todos os contratos da administración municipal desde o 2018″
¿Cuál es la realidad?
Ya en artículos anteriores informábamos de la imposibilidad de encontrar varios contratos en el tan cacareado portal de transparencia del Concello. Poníamos como ejemplo alguno relacionado con un acto de alcaldesas celebrado en A Coruña y donde Inés Rey ejerció de anfitriona.
Dicha situación no fue subsanada, es imposible acceder a esos contratos, ni utilizando búsqueda por concepto, proveedor o, lo que resulta más extraño, accediendo directamente con el número de expediente. El resultado de la búsqueda es nulo.
A través de otro artículo, también se demandaba transparencia en todos los contratos que se generaron durante la pandemia. El resultado fue el mismo, la callada por respuesta y total opacidad.
Pero hemos tenido acceso a una parte de esos contratos realizados durante la pandemia y podemos afirmar que no son accesibles a través de este portal de transparencia. ¿Qué quieren ocultar?
Finalmente cabe resaltar que, consultados los datos de los documentos oficiales de liquidación de ejercicio que pasan por intervención, y comparados con el resultado que ofrece esta plataforma mal llamada de transparencia, el resultado está más próximo a la ciencia ficción que a la realidad.
¿Cuál es el motivo por el que existe una plataforma de transparencia que oculta información?
