A pesar de la elocuencia que acostumbra a exhibir nuestra alcaldesa en sus numerosas manifestaciones públicas, sorprende que no haya realizado ningún comentario, ni en directo ni en sus redes sociales, a propósito de los dos altercados acaecidos el pasado fin de semana en el que murieron dos personas.
El joven Yoel moría apuñalado el sábado por la noche en las proximidades de la calle Juan Flórez, mientras el domingo, un hombre de 34 años era abatido por la Policía Nacional en el polígono de Agrela tras una reyerta.
Hasta el momento, la máxima autoridad de la ciudad no ha mostrado sus condolencias ni ha respaldado la actuación de los cuerpos de seguridad del Estado, un silencio que indigna a las personas afectadas.
A estos luctuosos acontecimientos hay que añadir las preocupantes imágenes de un hombre paseándose mientras empuña un machete por el barrio del Orzán-Pescadería.
Siguiendo el ejemplo de la alcaldesa, la máxima responsable de seguridad ciudadana de la ciudad, la cuestionada edil Montserrat Paz, tampoco ha emitido ningún comunicado al respecto y mucho menos el super concejal Lage Tuñas, coordinador de ese área.
Ante hechos de tal gravedad, el silencio del gobierno municipal resulta elocuente.