El equipo coruñés que nunca estuvo cómodo durante los 90 minutos saca un punto del tan esperando derbi.
Después de toda la polémica vivida durante la semana en las redes sociales por fin llegaba el momento del partido. El conjunto blanquiazul se encontró con un Racing de Ferrol muy motivado y que en líneas generales fue mejor que los coruñeses que no encontraron su fútbol en ningún momento.
Ian Mackay realizaría una muy buena parada en los primeros compases en un mano a mano con Dani Nieto que sería una pesadilla entre líneas durante varios instantes del encuentro, para los coruñeses. Quiles remataría alto un balón que llegaba muerto a la frontal al cual intentaba darle rosca pero sin impregnar la precisión necesaria. Volaría también Ian Mackay posteriormente en una dura volea desde la frontal del equipo local.
En la reanudación de la segunda parte Borja Jiménez ingresaría a Yeremay en el terreno de juego substituyendo a Villares. Cambio de esquema y búsqueda de profundidad por los dos costados. Insuficiente, no la intención, el no llegar a producirse la misma. El Depor no fluía.
El Racing más cómodo, acompasaba el encuentro hasta tal punto de poder disponer de un penalti a favor, bastante inexistente, que realizaria Alex Bergantiños. Lanzaba Dani Nieto y el balón pegaba en el larguero. Nathan aparecía por el aire como una apisonadora para cabecear a la red y sería cuando aparecería la polémica ya que el colegiado en vez de señalar gol y círculo central, pitaría falta del delantero brasileño, la cual parecía también inexistente.
Con estos acontecimientos se llegaba al final del encuentro con 0-0 en el marcador. En un partido flojo del conjunto coruñés y que se lleva la nota positiva de todos los aficionados coruñeses que arroparon la llegada del autobús del Deportivo a su llegada a La Malata. Esta afición no deja de sorprender. Próximo encuentro en Riazor contra el filial del Valladolid, es el momento de recuperar la senda de la victoria.