Mañana jueves, 9 de noviembre, el gobierno de Inés Rey llevará al pleno para su aprobación la propuesta del incremento de los impuestos municipales para el 2024, con la complicidad del BNG.
En los dos artículos anteriores analizábamos el nuevo IBI aplicado a las viviendas desocupadas y la tasa de las terrazas de los locales de hostelería. Pero vayamos más allá y observemos la finalidad del incremento de los impuestos municipales de la ordenanza que se desea aprobar para 2024. Se pretende recaudar más dinero cuando el gobierno local es incapaz de invertir y gastar lo que ingresa anualmente.
Ayer en una emisora de radio local coincidían todos los tertulianos en el poco sentido que tiene incrementar impuestos cuando el gobierno no gasta e invierte lo que actualmente recauda. Los tertulianos de dicho programa tienen distintas sensibilidades políticas, lo que refuerza la teoría del absurdo de las medidas.
Son varios los años en los que el gobierno municipal ingresa más de lo que gasta. Esta clarísima deficiencia de gestión se quiere ocultar con anuncios. Anunciar proyectos que después no se llegan a ejecutar y apostar por gastos en distintas aéreas que luego no se llevan a cabo. Eso sí, crecen los sueldos del personal de alta dirección que viene de fuera y crece el gasto en publicidad.
Todo ciudadano desea que el dinero de sus impuestos se invierta principalmente en la mejora de los servicios públicos y el desarrollo de las infraestructuras necesarias, por ello cabrea mucho a la población que se le aumenten las tasas municipales y dicha medida no revierta en el bienestar común, especialmente en unos momentos en los que la escalada de precios de los alimentos, los combustibles o las hipotecas ahogan las economía familiares.
Las cifras que ofrecen los datos del propio Ayuntamiento son claras; el gasto e inversión es inferior a lo que ya se recauda y mucho más de lo que se presupuesta.
La solución que ofrece este plan de ordenanzas fiscales es una notable subida de impuestos, salvo para los “pisitos” de Lage Tuñas.
Ante esta información, cabe realizar dos preguntas:
¿Por qué quiere el señor Lage Tuñas recaudar más dinero del que se invierte? ¿Aprobará el BNG estas medidas siendo necesario su voto y no poderse esconder en la abstención?
