En las últimas semanas, ha crecido el descontento entre los vecinos de Sada y Oleiros ante la posible eliminación o modificación de las líneas de autobús B14 y B13, gestionadas por ALSA, que conectan estos municipios con A Coruña. Estas rutas, que pasan por la costa, son vitales para numerosas paradas clave como Lorbé, Dexo, Mera y Santa Cruz, afectando también a paradas intermedias en localidades más pequeñas como Fontán, Pazos y Carnoedo.
Ante esta situación, los residentes han iniciado una campaña de recogida de firmas para presionar a la compañía y a las autoridades competentes con el fin de mantener estas líneas activas. En la campaña, se destacan dos principales solicitudes dirigidas a ALSA:
- Mantenimiento de las paradas y frecuencias horarias: Los vecinos de Sada y Oleiros exigen que no se eliminen ni modifiquen las paradas y frecuencias de las líneas B14 y B13. Para muchos residentes, estas rutas son esenciales para la movilidad diaria, ya que ofrecen una conexión directa con A Coruña, siendo cruciales para trabajadores, estudiantes y personas mayores, que dependen del transporte público.
- Autobuses adecuados en tamaño y frecuencia: En caso de que las líneas se mantengan, los usuarios piden que se adecuen los autobuses en tamaño y cantidad de servicios para satisfacer la demanda de viajeros. En muchas ocasiones, los autobuses disponibles resultan insuficientes, sobre todo en horas punta, cuando los trayectos se llenan rápidamente, dejando a algunos pasajeros sin espacio suficiente.
Impacto en Sada y Oleiros
La desaparición o modificación de estas líneas sería un golpe para la movilidad de los vecinos de ambas localidades. El transporte público es esencial, especialmente en áreas donde la oferta de alternativas es limitada. En este sentido, tanto Sada como Oleiros se verían gravemente afectadas si las líneas B14 y B13 dejan de operar o reducen su servicio.
Zonas como Lorbé, Dexo, Mera y Santa Cruz en Oleiros, además de áreas rurales intermedias como Fontán, Pazos o Carnoedo, verían perjudicada su conexión con Sada y A Coruña. Este cambio afectaría de manera directa a quienes dependen del transporte público para actividades cotidianas como ir al trabajo, la escuela, realizar compras o acudir a citas médicas.
Quejas de los usuarios
Uno de los puntos más críticos es la reducción de frecuencias horarias, que ya en su formato actual son insuficientes para la demanda. Las paradas intermedias que conectan pequeños núcleos con los principales municipios son esenciales para muchas personas. Reducir estos servicios implicaría mayor aislamiento para aquellos que no tienen otras opciones de transporte, empeorando su calidad de vida.
Peticiones vecinales
Ante el temor de quedar sin transporte público, los vecinos han iniciado una recogida de firmas con la esperanza de que ALSA y las autoridades locales reconsideren sus planes. Las peticiones no solo buscan mantener el servicio, sino también garantizar que los autobuses sean suficientes y que las frecuencias horarias cubran la demanda real de la población.
La campaña ha sumado un gran apoyo entre los vecinos de Sada y Oleiros, donde el sentimiento de indignación crece día a día. Muchos de los afectados consideran que el transporte público es un servicio básico que debe mantenerse para garantizar una movilidad equitativa y accesible.
El papel de las autoridades
Los ciudadanos piden que tanto el Ayuntamiento de Sada como el de Oleiros, junto con la Xunta de Galicia, intervengan para garantizar la continuidad del servicio. Es imprescindible que las administraciones públicas se involucren en la protección de estas líneas, ya que su desaparición afectaría a una gran parte de la población.
Además, consideran que las autoridades deben ejercer presión sobre ALSA para que mantenga el servicio de transporte y lo mejore en lugar de reducirlo. La eliminación o modificación de estas líneas afectaría no solo a los municipios directamente conectados, sino también a la conexión de la región con la ciudad de A Coruña.
Con esta campaña de firmas, los vecinos esperan que su voz sea escuchada y que ALSA proporcione una solución que garantice el acceso al transporte público para todos. A medida que se suman más firmas, la comunidad se moviliza en defensa de un servicio esencial para su día a día.
