El pasado miércoles 6 tuvo lugar una concentración-manifestación convocada por la Asociación de Vecinos Plaza del Comercio, logrando un éxito en lo que se refiere a su amplia cobertura de medios escritos, radios y televisión, pero mucho menos o nada por la atención prestada por el gobierno municipal.
A pesar de las amplias posibilidades de lograr salir en alguna foto parte de la Alcaldesa, no se pudo disfrutar de su compañía, ni de ningún miembro de su gobierno. La razón la supimos el día siguiente, cuando en el primer pleno ordinario de este el PSOE y BNG, votaron en contra de una moción que exigía soluciones para las ocupaciones.
La convocatoria de esta manifestación fue realizada por los vecinos de este barrio, que tiene más de medio siglo, donde disfrutaron de buenos momentos y otros menos buenos. Pero en este momento sufren una situación que los produce ansiedad generalizada por la falta de apoyo de las autoridades, destacando la administración más próxima al vecino, el ayuntamiento. El germen de este problema radica en una colonia de personas incívicas, que moran en el edificio número 120 de Ronda de Nelle y que entre otras cosas se dedican a la búsqueda y almacenamiento de chatarra, lo que provoca la proliferación de ratas, ruidos y deshechos que producen al manipular dichos materiales.
Otro de los problemas que destacan son las pelean entre los ocupantes de este edificio de ocho plantas, y ocupado en su totalidad, consumo de alcohol en la vía pública y otros actos con presencia de menores, que se deberían de erradicar de espacios públicos. Estos son los principales problemas que nos trasmiten los vecinos asistentes a la concentración y otros consultados con posterioridad.
Hacen referencia a quejas y denuncias presentadas donde destacaban el estado ruinoso del edifico, llegando a caer ventanas a la vía pública, con el riesgo que esto conlleva. La única actuación por parte del gobierno que preside Inés Rey fue la retirada de una gran cantidad de basura acumulada en este inmueble, pero que en poco tiempo se volverá a generar. Por lo que consideran una medida fue acertada pero insuficiente, y mucho menos resuelve un problema que tienen más frentes.
Son conocedores que este inmueble, de importante valor económico, tiene unos propietarios que tienen responsabilidad en esta situación, pero solicitan el apoyo de “la administración más próxima a los vecinos”, como suelen hacer destacar en campaña todos los que optan a tener en sus mandos el bastón de mando del municipal. Posteriormente suelen recuperar las habilidades de derivar responsabilidad hacia la Xunta y/o Policía Nacional.
A esta manifestación acudieron muchas personas “empadronadas en la ciudad”, no como los jabalíes que nos visitan estos días. Dejando chascarrillos aparte, no debemos de olvidar que en ese edificio entran y salen menores, por favor no sigan derivando responsabilidades.