¿Falta de Liderazgo o Estrategia Deliberada?
El primer pleno del año 2025 en el Ayuntamiento de A Coruña dejó en evidencia serias carencias en la gestión y moderación por parte de la alcaldesa, Inés Rey. Durante la sesión, que debería haber sido un espacio para el debate constructivo y resolutivo, predominó la desorganización y el desequilibrio en la repartición de tiempos de intervención, con decisiones que han generado críticas tanto dentro como fuera del salón de plenos.
Según la normativa que rige el funcionamiento de los plenos municipales, corresponde a la alcaldesa convocar y moderar las sesiones, asegurando un clima de neutralidad y justicia en el uso de los tiempos asignados. Sin embargo, Inés Rey optó por una postura pasiva, delegando en el concejal Lage Tuñas un papel que iba más allá de sus competencias como portavoz del gobierno.
Tiempo de Intervención: Favoritismos y Tensión
Un momento especialmente polémico ocurrió al final del pleno, cuando el portavoz socialista excedió en más de ocho minutos (11:48) el tiempo reglamentario de tres minutos asignado para su intervención. Esta permisividad contrastó con las restricciones impuestas a otros grupos políticos, que vieron limitadas sus oportunidades para exponer sus puntos de vista.
La gestión de Rey ha sido calificada por algunos asistentes como una «ausencia de liderazgo» que, en lugar de calmar los ánimos, fomentó un clima de descontento entre los concejales de la oposición, y que sus decisión tanto en la parte de gobierno como durante la presidencia del pleno, las toma Lage Tuñas.
Controversias y Declaraciones Contradictorias
Durante la sesión, Lage Tuñas dio a entender que el sistema administrativo del ayuntamiento no funcionaba correctamente, alegando que no había recibido propuestas del Partido Popular para los presupuestos. No obstante, documentos presentados previamente por el grupo de la oposición contradicen esta afirmación, cuestionando la veracidad de sus declaraciones, esta redacción ha tenido acceso a esta documentación presentada por el PP.
Por su parte, Inés Rey utilizó su tiempo como moderadora para abordar temas como el Mundial de Fútbol, sin ofrecer detalles sobre la inversión privada vinculada al evento, cuestión a la que se comprometió hacer pública. Esta falta de concreción ha levantado sospechas sobre la viabilidad de los compromisos asumidos en relación con este proyecto.
Un Pleno sin Contenido Resolutivo
Además de las tensiones internas, la sesión fue criticada por la falta de contenido resolutivo. La gestión municipal se desarrolla en los despachos de María Pita sin que tenga transparencia pública en el pleno municipal. Los temas abordados fueron calificados como secundarios y alejados de las prioridades que afectan a la ciudadanía.
¿Un Estilo Autoritario o una Gestión Ineficiente?
La actitud de la alcaldesa durante el pleno ha sido interpretada por algunos como un intento de consolidar un control excesivo del debate, lo que alimenta las comparaciones con un estilo de liderazgo autoritario. Otros, en cambio, ven en su actuación una simple muestra de desorganización y falta de preparación.
¿Un Futuro Incierto para la Gestión Municipal?
El pleno no solo evidenció problemas en la gestión del tiempo y el contenido, sino también una desconexión entre la alcaldesa y las necesidades reales del debate democrático. Si esta tendencia persiste, el liderazgo de Inés Rey podría enfrentarse a una creciente oposición y a un desgaste significativo en su credibilidad ante la ciudadanía.
