Gracias, PP: Inés Rey debería enviar flores por haber ‘salvado’ su Plan 2030-2050 de la directora ahora señalada por el Supremo
La alcaldesa de A Coruña acusó en su momento al Partido Popular de presionar a la ex presidenta de ADIF, pero el reciente fallo del Tribunal Supremo pone en evidencia que la decisión pudo evitar un mayor escándalo en el Ayuntamiento.
Hace un año, Inés Rey presentaba a Isabel Pardo de Vera como la figura clave para liderar el Plan Estratéxico A Coruña 2030-2050, el proyecto más ambicioso del gobierno local. Con un perfil de alto nivel en la Administración del Estado, Pardo de Vera fue designada para el puesto con el máximo rango y dotación presupuestaria. La alcaldesa llegó a elogiarla sin reservas: «Ojalá hubiera veinte Isabeles en España, pero solo hay una y ha decidido asumir este reto».
Sin embargo, la renuncia de Pardo de Vera meses después desató una fuerte polémica. Inés Rey culpó al PP de haber orquestado una «cacería difamatoria, machista y mediocre» contra la ex presidenta de ADIF, acusándolo de difundir «bulos y mentiras» para forzar su salida. «La ciudad pierde una referencia», lamentó Rey, asegurando que el Partido Popular había torpedeado un proyecto esencial para A Coruña.
El giro judicial: el Supremo ve delito en Pardo de Vera
Pero el tiempo ha dado un vuelco a la narrativa. El Tribunal Supremo ha apreciado indicios de delito en la actuación de Pardo de Vera durante su etapa al frente de ADIF, específicamente por la contratación de Jéssica Rodríguez, ex pareja del exministro José Luis Ábalos, en la empresa pública Ineco. El instructor del ‘caso Koldo’, Leopoldo Puente, ha derivado el testimonio a la Audiencia Nacional para que decida si procede imputarla.
Este desarrollo judicial pone en una situación incómoda a la alcaldesa coruñesa. ¿Era realmente Pardo de Vera la persona idónea para dirigir un plan estratégico de décadas? La investigación por presuntas irregularidades en ADIF sugiere que su vinculación con el Ayuntamiento podría haber generado un escándalo mayor de no haber renunciado.
Un proyecto estratégico en el limbo
El Plan 2030-2050, que incluía también el proyecto Coruña Marítima, ha perdido fuelle tras la salida de Pardo de Vera. Inés Rey insistió en que su marcha era una pérdida para la ciudad, pero lo cierto es que, un año después, la iniciativa no parece avanzar con la misma fuerza.
Además, Pardo de Vera no solo estaba al frente del plan estratégico, sino que también colaboraba con el fondo suizo que presentó el proyecto de urbanización de As Xubias, lo que añadía otro frente de posible controversia ante las sospechas judiciales.
¿Debe Inés Rey rectificar?
Ante las nuevas revelaciones, la alcaldesa debería reconsiderar sus críticas al PP. Lo que en su momento presentó como una campaña de difamación, ahora se revela como un posible caso de corrupción en ciernes. ¿Fue una suerte para A Coruña que Pardo de Vera no continuara?
«Inés Rey debería pedir disculpas por defender a quien el Supremo señala por posibles irregularidades», comentan algunas personas de la ciudad. Mientras, el gobierno municipal evita pronunciarse sobre el fallo judicial, aunque la sombra de la duda planea sobre la gestión de Rey.
Lo que queda claro es que el Plan Estratégico 2030-2050 necesita una dirección limpia y transparente. Y, por ahora, la ciudad sigue esperando respuestas.