Fracaso de los presupuestos de 2024
La gestión del presupuesto del Ayuntamiento de A Coruña para 2024, aprobado el 28 de diciembre de 2023 con los votos favorables del PSOE y el BNG, arroja una desviación de más de 100 millones de euros. Las cuentas, que ascendían a 375,4 millones de euros, representaban un incremento del 20 % respecto a las de 2022, con un aumento generalizado del 3 % en impuestos y tasas municipales. Sin embargo, a poco más de un mes para finalizar el año, las cifras revelan graves carencias en la gestión presupuestaria.
Ingresos muy por debajo de lo esperado
A fecha de 8 de noviembre, los ingresos municipales se sitúan 136,5 millones de euros por debajo de lo presupuestado. Las tasas y precios públicos, una de las partidas dependientes exclusivamente del Ayuntamiento, muestran una desviación de -17,3 millones de euros, lo que equivale al 25 % del total previsto.
El apartado de gestión financiera evidencia un panorama alarmante:
- Activos financieros: Solo se recaudaron 221.879 euros de los 41,8 millones presupuestados, lo que representa un escaso 0,53 %.
- Pasivos financieros: Se dejaron de ingresar 54,37 millones de euros, afectando la capacidad de endeudamiento y ejecución del Ayuntamiento.
Baja ejecución de gastos e inversiones
La ejecución presupuestaria en gastos también muestra cifras preocupantes:
- Inversiones reales:apenas se ejecutó el 15 %, dejando más de 98 millones de euros sin utilizar, incluso con remanentes de ejercicios anteriores.
- Gasto corriente:pendientes de ejecutar 58,6 millones de euros de un total de 155 millones presupuestados.
- Transferencias de capital:solo se destinaron 911.733 euros de los 24 millones previstos para colaborar en proyectos con otras entidades, reflejando un aislamiento institucional y una falta de entendimiento con otras administraciones.
Parálisis y falta de planificación
El incremento presupuestario aprobado a finales de 2023 ha quedado lejos de materializarse. La incapacidad de ejecutar inversiones y la baja recaudación evidencian una gestión deficiente y una parálisis administrativa.
Desde la oposición, se critica que las cuentas, concebidas para «crear titulares», han demostrado ser irreales, agravando la falta de proyectos cofinanciados y limitando el desarrollo de obras clave.
El Gobierno local de Inés Rey se enfrenta a crecientes cuestionamientos sobre su capacidad para gestionar el presupuesto y garantizar la sostenibilidad económica del Ayuntamiento. Con una desviación que supera los 100 millones de euros, el balance de 2024 deja poco margen para el optimismo.